Cansado de
escribirte quise dibujarte, cansada de intentarlo me recosté a soñarte.
Y aquí estoy,
soñándote entre letras, dibujándote frases, versándote.
Aquí me
tienes escribiéndole a una musa que ya no conozco, amando a una dulcinea que
alguna vez vi, tatuando mi piel con tinta de sueños.
Y aquí estoy
buscando un motivo para conversar de tu sonrisa, de tus ojos dulces de miel, de
aquella rara y tierna forma de hablar.
Aquí estoy:
hablándole al espejo, contándole sobre esa foto que pegué en una de sus
esquinas, de esa dulce niña con aroma a flores.
Voy entre
sueños y versos, imaginando la dulzura de esa dulcinea de tiempos pasados,
dejando mi cordura olvidada en el camino.
Aquí estoy
dibujando tu rostro entre la luna, perdida en mis letras estas, y yo aquí, soñándote
otra vez.
ass: D.
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